No soy el tipo de persona que le
gusta privar en santa porque si algo he
sido menos en mi vida es la más tranquila, la más bondadosa o la más tolerante,
pero si hay algo que me molesta en verdad es ver
como ciertas personas se aprovechan de otros más indefensos. No es el hecho de que el que tiene
más dinero pisotea al más pobre. En este caso se
trata de que el abusón se meta con el más dócil.
Ese tipo de persona sabe bien a
quien elige como víctima de sus acosos, es muy triste ver a alguien que vive
asustado sin necesidad, alguien que vive su vida como víctima de bullying o discriminación
de cualquier tipo. En esta sociedad te enseñan a tachar lo que es diferente
como algo malo, cuando no es así. Desde jóvenes nos enseñan a seguir ciertas normas, cumplir ciertos
patrones o encajar en ciertos estándares de belleza. Empiezas a sentirte mal si no opinas como los
demás o si tus gustos van más allá de lo permitido. Lo peor, quien utiliza esta
diferencia como excusa para lastimar.
¿Para qué estamos vivos? Acaso conocer
personas distintas a nosotros con creencias diferentes no podrían aportar
una perspectiva distinta ¿Por qué debemos convertir las diferencias en una
guerra?
No es justo degradar a alguien porque
pensamos que es distinto, por encajar con los demás, por estar bien con los
amigos. Hoy espero que cada uno tome un minuto de su tiempo y se dedique a
mirar o escuchar a alguien diferente. A ser más tolerante con las creencias
ajenas y dar a otro la oportunidad de vivir. No es necesario que una persona
llegue al punto de lastimarse a sí misma por el hecho de que siente que no
encaja en esta vida… Todos somos criaturas perfectas de Dios.
Comentarios